CAPÍTULO II:
“TE AMO...MÁS QUE CUALQUIER COSA”
Las semanas van transcurriendo rápidamente, mientras Giovanna intenta iniciar el proceso de divorcio con Michael, quien no terminó su consorcio con Fabricio a pesar del proceso que ya había empezado con su hija, aunque Fabricio era muy influyente en su campo, el procedimiento de separación tomaría un tiempo considerable. Por otra parte, Giovanna había tomado otro rumbo en su colegio, su relación amistosa con el Director del centro de educativo había crecido significativamente, tanto que la tomaban en cuenta para sin número de actos protocolarios, además, sus calificaciones habían subido mucho, mientras Zahori estaba pagando lo que le había hecho a Ricardo.
La ruptura entre Taylor y Victoria se había esparcido por todo el colegio, más a Giovanna, no le tomó mucha importancia, ya que trató de evitarlo desde aquella noche en que se habían besado, y por otro lado, Michael, continuaba insistiéndole en tratar de remediar su relación a lo que ella se negó rotundamente.
Una tarde soleada de sábado, ella se encontraba con su padre en la casa, pero éste parecía que saldría con Roxana, así que antes de que su padre se fuera, Giovanna le comentó que asistiría a una fiesta junto a Zahori, luego ella se alistó y tomó el otro vehículo de su padre retirándose a casa de su mejor amiga, para lograr que ambas se fueran a la fiesta, al llegar Giovanna tendía a no compartir mucho con sus compañeros, pero esa noche era diferente, ella sacó del congelador una cerveza, Mauricio, uno de los muchachos más guapos del colegio, la invitó a bailar así que ella se acercaba un poco más a él, mientras él la acariciaba, ella le sonrió pero dejó de hacerlo al escuchar que Victoria hacía comentarios hirientes contra ella contra el físico de Giovanna, lo que la aflige, pero en ese momento, Taylor se acercó a Giovanna con una cálida sonrisa, y le pide a Giovanna que bailen, entonces Giovanna deja a Mauricio con Elena, la joven tomaba su sexta cerveza y ya comenzaba a sentirse embriagada, cuando una melodía más sensual hizo se sus cuerpos se rozaran un poco más, Taylor la toma de la cintura por detrás susurrándole al oído:
- No le hagas caso a las estupideces de Victoria, está celosa porque eres más hermosa...
- Estás intentando hacerme sentirme bien? – Le responde Giovanna.
- No...simplemente...te digo la verdad...además...me gustas mucho – Mientras él se acercó y la besó por el cuello.
Ella se volvió y sonrió tímidamente guardando silencio por un momento, ambos continuaron bailando, hasta que era la hora de retirarse a casa, así que Giovanna se despidió de todos menos de Taylor, ya que él estaba hablando con unos muchachos y Giovanna consideró que era mejor no interrumpirlo, de esa manera, Giovanna y Zahori se fueron en el vehículo, al llegar a casa Carmen, la empleada de la casa por muchos años, la esperaba en ese momento alguien buscaba en la casa, así que ella se devolvió a la entrada y al abrir la puerta se da cuenta que era Taylor, ella se muestra un poco nerviosa al ver que él había cortado una rosa del jardín y se la entregó sin decir nada más se dio vuelta para retirarse, ella lo detiene del brazo para besarlo con la pasión y un sentimiento especial que había surgido por él, Taylor le pide que si pueden hablar un poco más, así que ambos se van al aposento que está cerca de la alberca, allí conversan sobre diversos temas por largas horas, hasta la posibilidad de surgir una relación sentimental entre ambos, ella se mostró un poco incómoda ya que estaba saliendo de una relación y aún se sentía extraña en empezar en una nueva con él, pero él estaba dispuesto a esperar por ella.
Los meses pasan, era evidente que la relación entre Giovanna y Taylor se hacía más fuerte.
Mientras que los hermanos tenían una presentación en la zona noroeste del país, ellas los acompañaron, mientras a la casa de Zahori se hizo presente Iveth, la prima de Zahori y amiga de Victoria, quién estaba enormemente atraída por Isaac, con el pretexto de pedirle prestado un libro a su prima, pero cuando Zahori volvió de esa presentación percibió que su padre estaba algo disgustado con ella, más no le toma importancia, pero su padre la detiene y la lleva al estudio para conversar:
- Zahori, usted me ha ocultado algo?
- Qué papi? – Pregunta ella desconcertada.
- No finjas Zahori Azofeifa! No finjas que no sabes nada! – Le gritó Arturo – Qué significa esto?
Arturo le entrega un documento extendido por el centro médico, donde comunicaba el aborto que Zahori se había practicado, ella guarda silencio al sentir el enojo de su padre.
- Por qué lo hizo?
- Porque no deseaba tener ese hijo de Ricardo – Le respondió Zahori mientras trataba de ocultar su mirada sobre el suelo.
- Zahori! La otra vez hablamos de esto, veo que sigues siendo igual de irresponsable, y me lo ocultaste!
- Qué podía hacer? – Protesta ella.
- Pues, tener ese hijo – Le grita Arturo rabiando.
- Jamás! No iba a estar atada a Ricardo, al final y al cabo me di cuenta que no lo amo, y yo te lo dije pero nunca me escuchas...forzándome a seguir mi relación con él – Le reclama Zahori a su padre.
- Ricardo es un buen partido para usted – Le grita Arturo.
- Viste! No me escuchas! – Le responde Zahori llorando – Perdóneme por no cumplir con su voluntar, pero ni por ser buen partido no voy a amarlo...!
- Ningún perdóname, no se da cuenta de la magnitud de ocultarme lo que usted hizo, algo tan delicado? – Le expreso Arturo – Soy tu padre, eres mi responsabilidad y no puedo permitir que se te desvíes de esa manera.
- No me estoy desviando! Mira que he sido una buena hija y alumna – Contesta enojada Zahori.
- No estás muy equivocada! Por qué no eres como tu prima Iveth? Ella sí es buena muchacha, además, si no hubiese sido por ella no me hubiera dado cuenta de esto – Le dijo Arturo.
- Qué? Esa se encontró el documento? Dónde lo encontró? – Le grita Zahori gritando.
- Ella vino porque necesita un libro tuyo, así que me pidió permiso para entrar a su cuarto, y allí lo encontró – Dijo Arturo.
- Mentira! Es mentira! El papel estaba dentro de un cajón en mi armario! Quién le dio las llaves de mi armario? – Le dice su hija rabiando.
- Fui yo, porque no encontraba el libro – Responde Arturo.
- Nunca! Me oíste? Nunca vuelvas a darle nada mío a esa mujer, no quiero que esa perra vuelva a entrar a mi cuarto! – Le grita Zahori – En caso de que no lo recuerde, ese cuarto es solamente mío, por qué violan mi privacidad?
- No me vengas diciendo qué tengo y qué no tengo qué hacer! Es más no te quiero ver más con ese músico! Ni siquiera que venga a mi casa! No quiero darme cuenta que te estás viendo con él a escondidas – Le gritó Arturo.
Las lágrimas brotaron de los ojos de Zahori, mismas que inundaron sus ojos al escuchar lo que le había dicho sobre Isaac, sintiendo que su padre le tenía más cariño a su prima que a su propia hija, cuando iba saliendo del estudio, chocó con Iveth.
- Perra! Nunca vuelva a entrar a mi cuarto – Le grita Zahori.
- Perdón primita! Es que tu papi me dio permiso de buscar el libro de ética para hacer un trabajo – Dijo Iveth en tono sarcástico – Y sin querer encontré que la señorita Azofeifa, bueno, no es tan señorita como se hace llamar.
- Estúpida! – Le grita Zahori dándole una fuerte bofeteada.
- Qué le pasa! Compórtate! – Le pide Arturo jalándola para que no la agrediera aún más.
- Mírala tío cómo me golpeó! – Dice Iveth.
- Aléjese de mí y de Isaac – Le susurró Zahori de modo de Arturo no escuchara.
Arturo, la tomó del brazo y se la llevó al cuarto donde le castigó, cuando Pablo llegó a la casa se enteró lo que sucedía así que subió donde estaba Zahori para reconfortarla, pero evidentemente estaba muy enojada así que para relajarse tomó su guitarra eléctrica de color azul rey, y comenzó a tocarla.
En la casa de Giovanna, Fabricio demuestra un poco de afecto al muchacho con quien estaba saliendo Giovanna aunque ella todavía no había obtenido el divorcio con Michael.
Un fin de semana, el grupo de amigos de Hanson decide salir juntos, eligiendo como destino un hotel de montaña, una noche antes de salir con ellos, Giovanna estaba con Fabio y éste le dice:
- Bebé, cuídate, ahora que usted se va con tus amigos al hotel.
- De qué hablas? – Le pregunta Giovanna.
- No te hagas! Un fin de semana para Taylor y para ti...tu sabes! – Le dice Fabio entre insinuaciones y bromas – Muéstrale todo lo que sabes.
- Ja ja ja! – Dijo Giovanna fingiendo una sonrisa pícara.
A tempranas horas de la mañana del día siguiente, en el parque de la ciudad llega una microbús, cada uno de los que irían se hacían presentes, luego abordaron el transporte y siguieron su rumbo hasta llegar a un hermoso hotel de montaña, con el frío, la flora y la fauna hacían que sensaciones de relajación total, durante el día ellos disfrutaron junto a sus amigos de una atmósfera bonita y acogedora, luego Giovanna le escribió un mensaje de texto al celular de Taylor:
“Angelito...te espero en mi habitación en veinte minutos, te amo”.
Éste la volvió a ver sonriéndole pícaramente, allí ella lo recibió cubierta por una bata de dormir, Taylor ingresó besándola con la pasión evidenciando aquel hombre que deseaba hacerla suya, Giovanna cierra los ojos y lo siente sobre su piel.
- Giovanna, estás segura de que lo quieres? – Preguntó él mirándola a los ojos.
- Por supuesto – Respondió Giovanna.
De tal manera, Taylor al escuchar el consentimiento de Giovanna recorrió cada centímetro de su cuerpo con aquellos besos y caricias que la hacían sentirse feliz, entre frases de afecto, sonrisas cómplices y tímidas, se susurraron más de un “te amo”, que quedaban impregnadas en el corazón de Giovanna, quién no lamentaba estar con Taylor esa noche. Por la mañana, ella despertó recostada al pecho cálido de Taylor, quién había despertado minutos antes que ella, se sonrieron y luego él la besó fugazmente.
Al transcurrir el fin de semana, la joven vuelve a su casa con mil ilusiones nuevas en su corazón al pensar en Taylor, y ya nada más le importaba, luego de un día arduo de lecciones, en esa tarde hermosa, Giovanna llegó a su casa, se dirigió a la estancia donde tenía su chelo y comenzó a tocar “Nada más importa”, cuando su padre con una amplia sonrisa se acercó a ella.
- Hace mucho no tocas el chelo.
- Sí, es que hoy sentí enormes ganas de hacerlo – Dice ella a su padre.
- Hija, necesito hablar con usted – Le indica Fabricio.
- Dime – Responde ella.
- Como sabes, Roxana ha sido mi pareja por meses, y la invité a vivir en nuestra casa – Le contó Fabricio.
- Qué! Y vendrá con Victoria? – Le pregunta Giovanna.
- Por supuesto, es su hija – Dijo él.
- Está bien, solamente te digo que mis sitios son míos, no quiero que tu novia y su hija entren a mi cuarto o toquen mi chelo, también quiero recordarte que Victoria fue novia de Taylor...ah! Y no quiero que ellas se metan para nada en mi vida – Le dijo ella cortante.
- Qué tienes contra ellas? – Le preguntó Fabricio un poco disgustado.
- Victoria y yo no nos llevamos bien, ella es amiga de Iveth, la prima de Zahori, que tampoco es buena persona...y ha querido que Zahori e Isaac se separen – Le dice Giovanna – Además, Victoria no me quiere desde que se enteró de mi relación con Taylor.
- De acuerdo, te lo prometo, no se hará ningún conflicto entre ustedes – Le dice Fabricio.
- Gracias papi – Le dijo Giovanna abrazándolo con fuerza.
No había pasado una semana cuando Roxana y su hija Victoria se habían ido a vivir a la casa de Fabricio y Giovanna, aunque ella quería estar en contra de que esas mujeres estuviesen allí, pero quería que su padre fuera feliz. Una mañana grisácea, Giovanna desayunaba junto a Fabricio, mientras entablan una conversación:
- Papi, quiero hacerle una pregunta.
- Sí, dime – Le responde Fabricio.
- Háblame de mi madre – Le dice Giovanna.
- Es momento de hablar de eso – Respondió Fabricio de inmediato.
- Ves? Siempre te pregunto de ella y me niegas conocer sobre ella – Dice Giovanna – Quisiera saber por lo menos su nombre.
- Bien, estás grande para saberlo y espero que me entienda todo esto que te contaré – Responde Fabricio – Se llama Mercedes González Chávez y ha sido la mujer que más amé en este mundo, creo que se dedica a la administración pública, digo que “creo” porque cuando nos separamos, ella quiso seguir con sus estudios de postgrado en el extranjero, al darse cuenta que su embarazo estaba muy desconcertada y quería abortarte para poder seguir con sus estudios...pero me negué y cuando naciste nos divorciamos...
- Quiso abortarme? – Se expresó Giovanna con lágrimas en los ojos.
- Sí, pero eso no la hace una mala mujer, ella era muy joven, y yo no quise que lo hiciera y esa fue la razón por la cual nos separamos, así que le propuse que me dejara tenerte y yo le daba el divorcio, Giovanna usted es mi mayor tesoro y no quería perderlas a las dos, pero ella tenía otras aspiraciones – Le explicó Fabricio.
- Gracias papi – Dice ella con la voz entrecortada y abrazándolo.
La tristeza la inundaba porque no sabía cómo manejar sobre lo de su madre, pero a pesar de ello tenía que seguir con su vida normalmente, esa misma mañana ella se fue a tocar el chelo en la estancia cerca de la alberca, cuando Roxana se le acercó.
- Muchacha, podría de dejar de hacer tanto escándalo con ese aparato – Le dice Roxana.
- Perdón? – Preguntó Giovanna exasperada – No es un aparato, se llama chelo, y con todo el perdón, yo lo toco cuando desee.
- No me gusta el ruido que usted hace – Le ordena Roxana.
- Qué sucede aquí? – Interviene Fabio.
- Su hija que insiste en tocar esa baratija – Responde Roxana.
- Déjela tocar...además tiene un excelente talento que supera a muchos - Dice Fabio, insinuándole que Victoria era mala para la música.
La respuesta de Fabio encolerizó a Roxana pero ésta se contuvo para no decir algo más, pero era evidente que no era la primera vez que ella y su hija intentaban humillarla o ponerla en contra de Fabricio. Los días transcurren, mientras Taylor se mostraba muy distraído con ella, y una tarde Zac la notó muy entristecida.
- Qué te sucede?
- Más bien, qué le sucede a Taylor? Él está muy extraño conmigo y no sé cuál es la razón? – Le responde Giovanna.
- Te voy a contar, pero deberías estar segura de lo que él siente por ti – Le dice Zac - Nuestros padres han estado discutiendo fuertemente, porque tenemos un hermano mayor en la cárcel...y en estos días del aniversario de su excarcelación él se pone un poco presionado.
- Hermano? Quién? – Preguntó Giovanna.
- Se llama Daniel, fue por un error de la vida, él disparó contra un hombre, y esa es la razón por la cual está encerrado, nosotros lo visitamos cada vez que podemos – Le explica Taylor.
- Amor no te preocupes, te voy a apoyar en todo lo que desees y necesites – Le indica ella acariciándole el cabello.
- Giovanna, tengo algo que decirte – Se acercó Fabio.
- Tú me dirás – Le dice Giovanna.
- Cariño, Luisa llamó hace unos minutos para avisar que Héctor acaba de morir de un infarto – Le cuenta Fabio.
- Qué! – Dice Giovanna dejando caer un par de lágrimas en sus ojos.
De esa manera, la mayoría de los estudiantes se enteraron que el Director de aquel centro educativo había fallecido, éstos asistieron a su entierro, ya que él fue muy estimado dentro del colegio, por su carencia, Giovanna se veía muy afectada porque había tenido muy buena relación con él y su esposa, después del acto fúnebre, fuertes rumores que habría una directora sumamente estricta se hacía cada vez más fuerte, misma que ingresaría tarde o temprano.
Una tarde soleada en que sus padres no se encontraban en casa, Zahori estaba en el garaje tocando su guitarra, el sonido era fuerte y la tonada se llamaba “Noche tras noche”, una canción que ella había compuesto cuando había entrado en depresión, su guitarra repentinamente se desconecta así que vuelve su mirada, era Isaac.
- Hola, mi amor! – Dice Isaac.
- Ike! No deberías estar aquí mis padres tarde o temprano llegarán a casa, y sabes que mi padre no quiere que estemos juntos – Dice Zahori.
- Tranquila, lo me importa nada más que estar junto a ti, porque te amo – Le dice Isaac.
- Lo sé, mi amor...pero conoces a mi padre, quiere que esté contigo – Le responde ella – Y tampoco quiero que te haga daño.
- Está bien, pero veré la forma de demostrarle que no soy como los otros tipos que se te acercaron, con paciencia, cobraré su confianza, porque quiero solucionar esto...porque te amo – Dice Isaac sonriéndole y robándole un beso fugaz.
Un día Fabricio, Roxana y Victoria salieron para pasar ese fin de semana en el noroeste costero, mientras Fabio y Giovanna permanecieron en el Valle Central, pero su hermano no perdió tiempo para estar dentro de la casa, cuando el día lectivo se terminó, Taylor se ofreció para ir a acompañarla hasta su casa, ambos caminan por la ciudad mientras conversan sobre diversos temas, cuando iban cruzando el parque una lluvia tempestuosa los hace mojarse de pies a cabeza, al llegar a la casa de la joven, ésta se siente un poco sensibilizada de él, quien estaba destilando agua así que le ofrece una toalla para que se seque, al acercarse para entregársela la atrae contra su cuerpo, ambos se quedan viendo directamente a los ojos, esas miradas decían más que cualquier cosa, ella se entrega totalmente a aquella atracción hacia él, mientras él la besó con enorme pasión, mientras afuera la lluvia era torrencial fue la excusa para que él se quedara con ella durante aquella noche, entre las sábanas de seda blanca el agua fue absorbida de sus cuerpos, Giovanna simplemente cerraba sus ojos al sentirlo más cerca de ella, mientras él con sus suaves labios acariciaba su piel, ella se estremece y gimotea un poco ante mil sensaciones acumuladas en su cuerpo, él le sonrió suavemente, ya que en esos momentos él era cauteloso pero intenso, unas cuantas miradas se cruzaban mientras ella no dejaba de ver aquellos hermosos ojos azules.
Semanas han pasado, después de la separación de Zahori con Isaac, y aunque ella no quiere admitirlo, no ha podido sobre llevar eso que la está aturdiendo porque el hecho de estar lejos de él le está afectado.
Al colegio ha llegado el director sustituto, aunque Giovanna tenía buena relación con el anterior, con éste ni siquiera lo había visto, menos tener la oportunidad de conocerlo. Una noche Zac, Silvia, Zahori, Taylor y Giovanna se fueron a un centro nocturno, llamado Suite 360, afortunadamente para Zahori, Isaac no los había acompañado, pero era evidente que ella se sentía un poco incómoda cuando observaba que sus amigos estaban en pareja, y ella era la única que estaba sola, en ese momento una ronda de cervezas llegó a la mesa donde ellos estaban, fue así cuando se comenzaron a preguntarse unos a otros si ya habían pedido más licor, fue cuando determinaron que ninguno había hecho el pedido de aquellas botellas, con las cervezas vino una rosa teñida de color negro, siendo Zahori a quien se la había entregado el mesero, el primer sentimiento que se acogió en ella era averiguar la razón del por qué de ese color, ya que lo consideraba muy extraño, luego pensó que se trabaja de una broma, pero una nota le cambió su punto de vista, ésta decía:
“Solamente te pido que me regales una sonrisa…día con día. Te quiere, Lintu”
Ella volvió su cara para todos lados tratando de averiguar quién le había enviado eso, pero no consiguió respuesta, así que antes de que el camarero se retire lo llama dándole una hoja con su nombre y su número de teléfono, esa noche ella no recibió alguna llamada de aquella persona que le había mandado la rosa, los días transcurren y una noche cuando ella estaba a punto de dormir, su celular comenzó a repicar insistentemente, así que ella contesta la llamada.
- Hola…
- Hola…con Zahori Azofeifa por favor – Dijo una voz varonil al otro lado de la línea.
- Soy yo, quién es? – Respondió ella un tanto soñolienta.
- Hola! Soy Lintu… - Dijo él notablemente nervioso.
- Lintu? – Le dijo ella despertándose bien.
- Sí, cómo estás? – Le preguntó él – Otra pregunta, te gustó la rosa?
- Estoy bien...y muchas gracias por la rosa, aunque me extrañé que me dieras una rosa negra – Le comentó ella – Ahhh...! Y muchas gracias por las cervezas.
- Con gusto, porque espero que no sea la única vez que te pueda invitar – Dijo Lintu.
- Muchas gracias...ahora dime cuándo te podré conocer? – Le cuestionó Zahori.
- A mí? En cualquier momento... – Sonrió Lintu – Todo a su tiempo...
- Lintu...ese es su nombre? Verdad? – Consultó ella.
- No, de hecho, mis amigos cercanos me llaman así, pero en realidad me llamo Daniel Rodríguez – Responde él – Podrías ir mañana al Suite 360, yo estaré allí...tomando con unos amigos...y será muy agradable que estés allí conmigo.
- De acuerdo – Respondió Zahori.
- Cuídate – Dijo él colgando el teléfono.
Ella también corta el teléfono y se duerme con el anhelo de conocer a ese hombre que le había regalado la rosa negra, para la noche siguiente Zahori le consultó a Arturo si podría salir, pero él se negó, ya que esa ocasión había hecho una cena especial en celebración de su cumpleaños para su madre. Entonces mientras ella esperaba el momento para salir con sus padres, se encontraba escuchando la radio, fue en ese instante cuando comenzó a escuchar la canción “Más que cualquier cosa”, ella le sube un poco el volumen mientras un par de lágrimas recorrieron sus ojos, luego de que la canción terminó, era una entrevista con ellos.
- Ike, qué te inspiró para componer esa canción tan romántica? Quizás hay alguien que te está robando el corazón? Eh? – Preguntó el locutor.
- Esta canción? Bueno, la escribí cuando conocí a alguien especial, al punto que me robó el corazón – Dijo Isaac con una sonrisa – Bien, y por si ella está escuchándome quiero decirle que la amo más que cualquier cosa.
- Wow! Realmente, estás muy enamorado! Y ustedes dos, qué tienen que decir al respecto? O ya sus corazones tienen dueña? – Continuó la indagación.
- Nos gusta lo que hacemos, por lo tanto, amamos dar presentaciones y compartir con nuestros seguidores – Interrumpió Taylor, tratando de no caer en más detalles de sus relaciones.
De esa manera, Zahori escuchó toda la entrevista con Hanson, poniéndole atención a cada palabra que ellos habían dicho, hasta escuchar que se dio al aire, un número telefónico para integrar un club de seguidores, inmediatamente, Zahori se comunicó con el club, para integrarlo, luego llamó a su mejor amiga.
- Amiga, usted escuchó la entrevista con los muchachos en la radio? – Preguntó Zahori.
- Sí, qué bonitos! – Dijo ella.
- Me acompañarás a la reunión del club de seguidores? – Dijo Zahori.
- Estás loca? Te imaginas las chicas de Isaac y de Taylor en esas cosas, usted no piensa que eso sería demasiado? – Dijo Giovanna.
- Para mí, no hay ningún problema, la verdad, no lo puedo ver por culpa de mi padre – Dijo Zahori un poco afligida.
- De acuerdo...creo que una pequeña diversión nos vendría bien – Dijo Giovanna.
- Bueno, me adelanté y ya llamé, la reunión será el próximo sábado a las once de la mañana, en el parque del norte de la capital – Le explica Zahori.
- Bueno, iremos con el pretexto de que me acompañarás a comprarme algo que donaremos en un proyecto de beneficencia – Dijo Zahori – No quiero que mi padre se enoje porque vaya a eso...además...escucharemos que dicen esas personas de nuestro amores.
- Claro, solamente iremos por diversión – Dijo Giovanna entre sonrisas y bromas.
Entre semana, en el colegio había una reunión de padres de familia, la razón era la entrega de calificaciones, por ese motivo Fabricio fue al lado de Roxana a aquel sitio, Giovanna permanece con su novio en la cafetería, donde muestra muy entusiasmada porque sus padres se conozcan, Taylor accede a ese sentir de su novia, pero hasta el final de la reunión, al ésta terminar, la joven jaló a su padre hasta donde estaba el padre de Taylor, Fabricio se puso un tanto distraído al acercarse a ellos.
- Papi, tengo que presentarte al padre de Taylor.
- Ah, sí! Discúlpame, felicitaciones mi amor tus calificaciones son excelentes – Dijo Fabricio.
- Señor... – Dijo Giovanna, mientras el padre de Taylor se volvió hacia ellos – Él es mi padre...
- Hola, Giovanna! – Dijo el padre de Taylor – Usted!
- Giovanna, usted es la novia del hijo de este hombre? – Interrumpió Fabricio – Nos vamos de aquí inmediatamente!
- Qué sucede papá? – Dijo ella oponiéndose a la reacción de su padre.
- Nos vamos ahora mismo! – Le gritó Fabricio autoritariamente.
- Padre! – Dijo Fabio acercándose a ellos al ver lo que sucedía.
- Taylor, no se vuelva a acercar a mi hija – Le dijo Fabricio.
- Qué estás diciendo? Cómo le puedes pedir eso a Taylor, si él es mi novio y nos amamos – Le reclama Giovanna.
- Bebé, vamos, dejémoslos solos – Dijo Fabio abrazándola para evitarle un disgusto.
- No! Quiero ahora mismo qué sucede? De dónde se conocen? Qué me están ocultando? – Reniega Giovanna.
- Walker, qué sucede? – Dijo Taylor.
- Lo mismo diría yo, Taylor no quiero verte con esa muchacha – Dijo Walker.
- Qué rayos! – Gritó Taylor.
- Papá, quiero una explicación! – Gritó Giovanna.
- Éste es el hermano del asesino de Orlando, por lo tanto, él también es un asesino – Le indica Fabricio.
- De qué hablas? – Dijo ella desorientada y volviendo a ver a aquellos rostros que estaban reflejándose odio entre sí – Taylor no es así!
- Vamos Taylor – Dijo Walker.
- Taylor – Dijo ella tomándolo de la mano, con el rostro lleno de angustia ante aquel futuro incierto.
Ella se acercó tomándole el rostro y le susurra.
- Angelito...yo te amo...
- Déjame tranquilo – Dijo Taylor con el rostro lleno de rencor.
Giovanna monta al automóvil que vuelve para ver el coche de Walker en donde a Taylor se le notaba el rostro lleno de tristeza, al llegar a casa Giovanna lo que hizo fue encerrarse en su habitación, fue en ese instante que llegó Fabio, fue a la única persona que dejó ingresar a su recinto, y quien le explicó todo lo que había sucedido entre los Hanson y los Jiménez, ella estaba muy entristecida porque su padre estaba en contra de su relación con Taylor por un hecho del pasado, era obvio que existiera cierto resentimiento contra ellos por la muerte de Orlando, pero no era justificación por lo que él y Walker habían accionado en el colegio. En la mañana siguiente, ella logró observar a Taylor, pero él trató de esquivarla porque sentía que estaba traicionando a su familia, aún así ella se acercó a él, pero él trató de evitar cualquier cruce de palabras, lo que hizo que ella reaccionara con lágrimas en los ojos por aquel rechazo que él le había hecho, ella le tomó el rostro obligándolo que la viera a los ojos.
- Angelito, quiero que no te olvides que a pesar de lo sucedido entre nuestras familias en el pasado, nosotros no debemos separarnos, recuerda las ocasiones en que estuvimos juntos... – Dijo Giovanna tomando sus manos de modo que él las entrelazara en su cintura mientras ella le acariciaba el cabello – No creo que ese hombre que me amo la otra noche haya muerto y desaparecido de la noche a la mañana...angelito...te amo de verdad...
- Giovanna, por favor no me hagas las cosas más difíciles, no quiero seguir más con usted – Dice él firmemente.
Después, ella lo suelta y se separa de él, ella siente muchos deseos de gritarle para que él reaccionara pero se contuvo, luego se refugió en el querer de sus dos mejores amigas, Zahori y Silvia.
Pero las cosas que sucedía entre las chicas y los Hanson, no fue obstáculo para que los planes realizados para el sábado, ese día era uno de esos bien soleado, en donde ambas se fueron al parque, cuando llegaron lograron ver muchos seguidores de Hanson, lo que las alegró, Zahori se sentó al lado de una chica que tenía una extensa colección de fotografías, mientras que Giovanna se sentía un poco enferma así que permaneció sentada, Jennifer, la presidenta del club de seguidoras, hablaba varios asuntos alrededor de ellos, como noticias, posibles convivios con ellos, y nuevas grabaciones, mientras entre las muchachas daban su propio criterio.
- Tengo un amigo que podría hablar con Isaac para que venga a uno de nuestros convivios – Dijo Jennifer.
- Ja! Ike le huye a las reuniones con seguidores – Dijo Zahori suavemente – Se recuerda la última vez, se hizo el enfermo...aunque quiere mucho a las chicas, pero no suporta a las que los ahogan.
- Ahora, vieras chicas me contaron un chismecillo sobre ellos, dicen que Zac se pasea por todo el colegio con sus bolillos – Contó Jennifer – Y que Taylor le gusta pasearse en pantaloncillos cortos por toda su casa.
- En mi casa le fascina andar desnudo – Murmuró Giovanna.
- Disculpa, eres nueva verdad? – Preguntó Jennifer.
- Sí, por qué? – Dijo Giovanna.
- Es que tenemos la política que cuando estoy hablando debemos hacer un poquito de silencio, para que todas puedan oír, o bien, si desea compartirlo con nosotras – Dijo Jennifer.
- No se ofenda, pero lo que le decía a mi amiga, es que si se puede imaginar a Taylor en esos pantaloncillos? – Le contó Giovanna.
Eso causó que algunas chicas murmuraran su deseo de verlo así.
- Bien que mal, se debe ver hermoso, o no? – Continuó Giovanna.
- Qué griterío! – Interrumpió Zahori – Dios nos libre si le lo imaginan desnudo.
En esa reunión las chicas se divirtieron mucho, y luego de eso, cada una se devolvió para su casa, al llegar a ella Fabricio había preparado una cena especial para anunciar su compromiso con Roxana, aquella noticia no fue tomada con gusto por Giovanna, pero, apoyaba a su padre al verlo feliz y satisfecho con esa mujer.
Al día siguiente, cuando Giovanna salió de clases, ésta logró ver a Taylor de la mano con Victoria, ella comenzó a sentirse muy disgustada porque no podía asimilar que Taylor estaba desplazando sus sentimientos por él, en ese momento, Silvia y Zahori llegaron a donde Giovanna, las chicas la animaron para que ella hablara con él, pero éste volvió su rostro para otra dirección haciendo que el corazón de Giovanna se destrozara más de lo que estaba. Suena el timbre de la entrada, así que los jóvenes ingresan al salón de clase, Giovanna y Victoria coinciden en ese mismo instante y chocaron accidentalmente, y Victoria le dice:
- Estúpida! No ve por donde camina?
Giovanna guarda silencio para evitar problemas, da vuelta alrededor y va al interior de la clase, pero la Victoria la para por el brazo.
- Un momento, estúpida estoy hablando con usted
- Déjeme en paz! – Le gritó Giovanna muy exasperada, soltándose del brazo donde la sujetó para detenerla.
Victoria no dijo ni una sola palabra, cuando vio venir a Taylor dirigiéndose a ellas.
- Giovanna, no le hagas caso...creo que es mejor evitarse problemas con ella.
- Déjame en paz! – Le grita Giovanna – Váyase con su noviecita!
Posterior a eso Giovanna habló con sus amigas.
- Giovanna, vamos al Suite 360! – Dijo Silvia.
- Vamos, Zac usted puede hacerle un gran favor a la cuñada del alma? Puede ir con nosotras Isaac – Le susurró Giovanna al oído.
- No puede mañana tiene que presentar un examen – Dijo Zac.
De esa manera, Giovanna y las otras se montan el automóvil del padre de Giovanna, quien se lo había prestado para esa noche, Giovanna condujo hasta el centro nocturno, ante el arribo de ellas, el lugar estaba abarrotado de gente que le agradaba el sitio, así que ellas entraron y buscaron una mesa, en donde disfrutan de la música, la hilaridad y las múltiples conversaciones entre ellas, Zahori observaba a su alrededor, con la esperanza de encontrar a Lintu, luego olvidó eso y se dedicó a consumir licor, en ese momento llega la primera invitación de cervezas, lo que fue señal que Daniel andaba por allí, Taylor y Victoria, quienes a pesar de no haber sido invitados se presentaron en el lugar, Zac los invitó a sentarse con ellos, mientras el rostro de Giovanna se notaba encolerizado, pero tenía que tolerar aquel disgusto ante la presencia del hermano de su amigo, luego la segunda ronda de cervezas llega a la mesa, Zahori se siente un poco embriagada y se va a la barra para tomar un poco de aire, escuchó un saludo que venía de una voz que ella conocía, así que inmediatamente se volvió a ver, pero no logró identificarlo ya que era un hermoso hombre acercándose a ella.
- Cómo estás?
- Perdón, te conozco? – Dijo ella sin aún reconocer el rostro.
- Soy Lintu – Respondió él.
- Lintu? Hola! – Dijo ella un tanto entusiasmada.
- Viniste con tus amigos – Dijo él.
- Sí, pero estoy cansada de estar con ellos así que me vine a despejar un rato por acá – Comentó Zahori.
- Ahh...y por qué no viniste la otra noche? Me dejaste esperándote – Dijo Daniel.
- Tuve un pequeño percance con mis padres – Dijo ella – Pero aquí estoy...y me agrada conocerte mejor.
Así, al cabo de extensas horas de conversación sobre sus vidas, Zahori no cedía y eludía con suspicacia las preguntas sentimentales que de vez en cuando Daniel le hacía, mientras de fondo se escuchaba la canción “Más que cualquier cosa”.
- Vamos con tus amigos – Dijo él.
- Claro – Responde Zahori.
Ambos se unen a ellos, luego de que Zahori los presentaba.
- Mucho gusto Daniel – Dijeron ellos.
- El gusto es mío – Respondió él educadamente.
- Sí, Miguel tráeme dos whiskys – Dijo Daniel.
- Sí, señor, desea algo más? – Dijo el camarero.
- Muchachos, desean más cerveza o algo más? – Consultó Daniel.
- Claro – Respondió Zac.
- Entonces son compañeros de clase de Zahori, los recuerdo bien! Ustedes son los músicos que estrenaron su disco aquí la última vez! – Dice Daniel rompiendo el silencio – Oigan, deberíamos ir de paseo a la playa o a la montaña alguna vez.
- Claro – Respondió Zac – Bueno, en realidad, yo no soy compañero de Zahori, pero por qué te vemos muy seguido por acá?
- Es que soy el dueño de este centro nocturno – Respondió Daniel – Un momento, Giovanna Rosenbaum?
- Es que... – Dice ella mirando hacia el suelo.
- Vaya! Miren a quién me vengo a encontrar acá? A la esposa de mi estimado amigo Michael, pero qué demonios haces acá? Cuando él está en la segunda planta del VIP? – Pregunta Daniel.
- Es que... – Le repite ella tratando de disimular su mal estar.
- Demasiado tarde! Hey Michael! Ven acá! – Grita él llamándolo al verlo en la barra.
- Hola – Dice Michael con la voz entrecortada acercándose hacia ellos, y se notaba nervioso al ver a Giovanna.
- Qué sucede? – Dice Daniel notando la frialdad de aquel encuentro.
- Luego hablamos – Dice Michael tratando de retirarse.
- Por qué te vas? Si tu esposa está aquí – Dice el amigo de Michael.
- Daniel, tengo unos ejecutivos en la segunda planta, y si no cierro el contrato hoy...usted sabe – Dice Michael retirándose.
- Cariño, él y yo nos estamos divorciando – Responde Giovanna al verlo irse.
- Qué pena! Hacían bonita pareja, pero perdón por lo que cause – Dice Daniel.
- Tranquilo, hay peores estupideces peores que las personas pueden hacer – Dice Giovanna volviendo a ver a Taylor.
Compartiendo juntos toda esa noche entre de whiskies y muchos licores más, Giovanna se sentía más ebria que nunca, así que le pidió a Silvia que la fuera a dejar a la casa, dándose cuenta que minutos antes Taylor y Victoria se habían retirado del lugar. Una tarde de jueves, el matrimonio entre Fabricio y Roxana se celebraba, razón por la cual le pidió a Fabio que la acompañara, en el bufete de un amigo colega de Fabricio allí estaban los testigos, amigos y demás de la pareja, entre ellos Taylor, Victoria, Michael junto a sus padres, el abogado toma su respectivo protocolo para casarlos, en el momento de la firma del acta el bolígrafo de Fabricio no escribía, así que Giovanna le ofreció el suyo, Fabricio la volvió a ver con un rostro de incrédulo ante la reacción de Giovanna, ya que ella no quería que su padre contrajera matrimonio con Roxana, pero esa ocasión tomó otra actitud, contra que su corazón estaba destrozado, cuando el acto se finiquitó, Giovanna logró ver cómo Michael tenía su mirada fija a ella, solamente con los brazos cruzados. Esa misma noche, Fabricio hizo una recepción para sus invitados para celebrar su matrimonio, ella no quería ir pero no iba a darle gusto a Victoria ni a Roxana de que hicieran malos comentarios contra ella y su padre, así que asistió, ella permanecía en su silla conversando y bebiendo licor junto a Wendy, la mano derecha de Fabricio, cuando su reloj marcaba alrededor de las doce de la noche, Giovanna decidió irse para el centro nocturno, pero cuando iba por el vestíbulo, la detuvieron del brazo, era Michael, ella suspiró profundamente.
- Michael – Le dijo ella.
- Giovanna...no te vayas... – Le dijo él.
- No me siento bien aquí y usted lo sabe – Dice Giovanna.
- Es el matrimonio de tu padre – Dice él.
- Es mi infierno terrenal...esas mujeres me hacen la vida imposible – Le responde ella.
- Bueno...y a dónde ibas? – Le pregunta Michael.
- No te importa – Le responde Giovanna – Mira Michael el que quiere decir que hayamos cruzado unas cuantas palabras en el Suite 360, no quiere decir que puedes acercarte a mí cuantas veces te de la gana.
- No...pues no...pero tampoco has dejado de ser mi esposa – Dice él.
- Vaya! Veo que se está saliendo la hombría, eso debiste pensar cuando te acostaste con esa mujer, y con su permiso no quiero hablar contigo – Dice Giovanna.
- Por favor, no me entiendes, aún te amo ciegamente – Le responde Michael.
- Bla, bla, bla, bla...me encantan tus cuentos...déjame en paz! – Dice Giovanna exasperada.
- Pues no! – Le responde Michael.
Giovanna al ver que él no la soltaba ella se dio vuelta y caminó hasta el ascensor, al este abrirse ella ingresó y tras de ella venía Michael.
- Por Dios! Michael! No entiendes que no quiero pelear contigo, además, estás muy ebrio para acatar lo que me estás diciendo – Le dice Giovanna.
- No me voy a ir así porque así – Dice Michael.
Michael la siguió hasta cansarla, ella encontró una puerta de una de las habitaciones abierta así que ingresó.
- Por Dios Giovanna ábreme! Te lo suplico – Grita Michael.
- Vete! – Le responde Giovanna.
- No, no me voy hasta que me digas que me perdonas por lo que te hice – Le responde Michael.
- OK te perdono, pero ya vete, hombre más necio – Dice Giovanna.
- Dímelo de frente – Dijo Michael desafiándola.
- Te perdono… - Dice Giovanna, compadeciéndose de él al abrirle la puerta.
- Vaya…! Hasta que te dignaste a perdonarme – Responde Michael.
- Porque no tengo más rencor por ti – Le dice Giovanna - Es momento que te vayas.
- No me eches – Le responde Michael con una voz dulce – Mira que me iré un par de meses fuera del país y quiero que mi última noche aquí sea contigo.
Él la jala hacia adentro de la habitación, ella comenzó a sentir muchas cosas en su interior, entre ellas una emoción, porque conocía bien a Michael, él comenzó a besarla con enorme pasión, mientras ella perdía los estribos dejando sobrepasar su instinto para entregarse a Michael, ella se agitaba de fruición al sentir cómo él la estaba penetrando, esa noche no fue por el sentimiento que hubo por él, sino por no estar sola y no sentirse como se sentía al ver a Taylor con esa mujer, al transcurrir varias horas desde el primer beso Michael se había saciado varias veces de ella, él se durmió a su lado, Giovanna se volvió a vestir y se retiró al centro nocturno donde acostumbraba visitar junto a sus amigos, ella comenzó a consumir alcohol de manera exorbitante, Javier, uno de los empleados de Daniel, lo detecta y se lo advierte a Giovanna, pero el licor se estaba convirtiendo en su mejor compañía, para sobrellevar el dolor y el vacío que sentía en su interior, ella estuvo allí hasta las cinco de la mañana del día siguiente, luego llegó en un taxi a su casa en donde su padre ya se encontraba trabajando y su hermanastra en el colegio, así que para no armar revuelo en su padre, se dispuso a prepararse e irse para el colegio, cuando volvió su padre no le dijo nada.
Y así Giovanna estuvo durante varios días, en el día se iba al colegio y en la noche se metía en el Suite 360 hasta que su conciencia sobre el infierno que sentía al estar en su casa se consumaba en el alcohol que copa tras copa ella bebía, una mañana en la cafetería del centro educativo, Giovanna se sentó a tomarse un café bien cargado para bajar el efecto de la borrachera de la noche anterior, ve que Zahori se acerca a ella, mientras Giovanna tomaba un sorbo.
- Ay Giovanna! No deberías tomar tanto – Le aconseja Zahori.
- Es lo único que me hace olvidarme que estoy en mi casa – Le responde Giovanna.
- Pero, por qué no te vas a mi casa y te quedas conmigo, en vez que irte al 360 – Dice Zahori.
- Amiga eres un ángel – Le responde Giovanna – Esta noche iré a tu casa, pero, no habrá problemas con tus padres?
- Bah! Mi padre prefiere que seas tú y no Ike – Dice Zahori.
- Ay Hanson! Que no hacen sufrir – Dice Giovanna.
- Sí…dime una cosa Michael no te ha llamado? – Dice su amiga.
- La verdad sí, pero no le contesto, se ha puesto muy insistente desde que hicimos el amor aquella noche – Le responde Giovanna.
- No deberías jugar con él – Dice Zahori.
- No estoy jugando con nadie – Dice Giovanna – El que quiera decir que me haya acostado con él no quiere decir nada…
En ese momento Victoria iba pasando y dejó caer con mala intención, un poco de agua sobre Giovanna, quien inmediatamente se levantó y la empujó.
- Cuál es el problema? – Dice Giovanna gritándole.
- Ninguno hermanita…lo siento – Le respondió Victoria con una voz evidentemente sarcástica.
- No se atreva a decirme “hermanita”, porque usted no es nada mío! – Le vuelve a empujar.
- La verdad sí, disculpa, es más debería avergonzarme de tener una hermanastra alcohólica – Le responde en voz baja.
- No soy alcohólica! – Le grita Giovanna empujándola bruscamente – Déjeme en paz!
- Qué? Que no eres alcohólica? Huélete estás pestífera a licor, qué asco! – Le dice Victoria.
- Victoria! Deja en paz a Giovanna! – Intervino Taylor jalándola del brazo.
- Eso! Llévatela porque estoy a punto de perder los estribos con esa porquería – Dice Giovanna.
- Vamos… - Le dice Taylor.
- No te metas con esa mujercita – Intervino Zahori, para evitarle los problemas a su mejor amiga.
- No soy mujercita, aquí la única mujercita, es usted, quien aborta a la hora que le da la gana, y su mejor amiga, quien se acuesta con cualquiera – Le grita Victoria
- Cállate – Le grita Zahori enojadísima.
- Mujercita? No! Soy bien mujer! Y de eso está muy seguro Taylor, pregúntaselo!
- Bastarda! – Le grita Victoria.
Giovanna se encolerizó porque esa mujer las insultaba tanto que arremetió contra Victoria, ésta le responde de igual manera, mientras Taylor intervino tomando a Giovanna por la cintura para quitarla de encima de Victoria, muchos estudiantes, mientras Zahori trataba de quitar a Giovanna de encima de Victoria, pero era demasiado tarde, Roberto, el asistente del director se había acercados a ellos entre el tumulto de estudiantes, así que se las lleva a ambas a la oficina de la dirección, Giovanna estaba más encolerizada que temor de alguna sanción ante su falta, una vez que ingresaron a la oficina, Giovanna logró ver que quién había sustituido al director que había fallecido, era una mujer, mientras tanto Victoria armaba tremenda escena tratando de que su sanción fuera mínima y que el peso de esta cayera sobre Giovanna, la directora observa a ambas.
- Señoritas, saben perfectamente el reglamento interno, y ustedes han roto muchas reglas en un solo momento, tienen que tener más cuidado, más en estas semanas que son las finales del curso lectivo – Dijo la directora seriamente.
- Haga lo que tenga que hacer, ya no me importa continuar aquí con esta mujer – Respondió Giovanna muy desafiante.
- No se altere, la violencia no lleva a nada, cuénteme lo sucedido entre ustedes – Dice la directora.
- Yo no tengo problemas con ella – Respondió de inmediato Victoria – La que tiene problema conmigo es ella, que tiene celos de mí, porque nuestros padres se casaron, y porque soy la novia de su exnovio – Continuo ella entre lágrimas.
- No seas bruta! No estoy celosa de Taylor menos de mi padre! Por qué me acosa tanto? Estoy cansada de usted y de su madre, que lo único que vinieron a hacer entre mi padre y yo, fue deteriorar nuestra relación... – Le grita Giovanna exasperada.
- Díganme...es cierto o no que se agredieron? – Interviene la Directora.
- Pues sí, señora Directora, mire cómo esta salvaje me ha rasgado el brazo y la cara – Dice Victoria – Y por cierto, ya le olió el aliento a alcohol que tiene? No es cierto que es una falta gravísima venir en estado de ebriedad al colegio?
- Señorita, no vengo a cuestionar el alcohol o las fricciones entre ambas, lo que les vengo a preguntar, por qué agredió a su compañera? – Dice la Directora.
- Pues sí! Y si me diera la oportunidad lo volvería a hacer! Estoy cansada de que esa mujer se meta en mi vida – Le grita Giovanna.
- Cuál es su nombre? – Le pregunta la Directora.
- Giovanna – Responde Giovanna.
- Y el suyo? – Se dirige a Victoria.
- Victoria – Respondió esta.
- Roberto, tráigame los expedientes de estas dos muchachas – Dirigiéndose a su asistente, quien trajo con él los expedientes solicitados – Lamentablemente tendré que llamar a sus padres para hacer de su conocimiento lo que está sucediendo, máxime, si son hermanastras, Victoria, será castigada a una semana de trabajo de asistencia en la sala de tecnologías, mientras a usted, está expulsada por unos días.
Giovanna, entre los sollozos volvió su rostro por la ventana viendo cómo Taylor esperaba a Victoria a que saliera de la dirección.
- Sé que me merezco la sanción...pero estoy cansada de ser yo la mala de todo...y esta mujer me aturde día y noche – Comentó Giovanna.
- Pero no es motivo para que recurra a la violencia – Le indica la Directora.
- Señora Directora...ya me puedo retirar? – Dice Victoria.
- No me digas “señora Directora” soy Mercedes – Respondió ésta.
- Disculpen, señora González, podría firmarme este permiso – Interrumpió la secretaria – Giovanna! Te sientes bien?
- Sí – Respondió Giovanna sonriéndole vagamente.
- Mercedes, Giovanna es uno de los mejores estudiantes del colegio – Le indicó ella retirándose.
- Mercedes González...? – Pensó Giovanna en voz alta – Mercedes Giovanna González Chávez.
- Cómo sabes mi segundo nombre? – Pregunta Mercedes volviéndose atónita a ella.
Giovanna guardó silencio, y la miró confundida.
- Conoce a Fabricio Jiménez? – Le pregunta Giovanna.
- Fabri? Cómo sabe de Fabricio... – Mientras Mercedes inconscientemente recorre las páginas del expediente de Giovanna.
- Oh! Por Dios! Giovanna – Dice Mercedes permaneciendo boquiabierta ante ambas jóvenes.
- Si no necesita nada más de mí, puedo retirarme? Además, tengo que recoger mis cosas para irme – Preguntó la joven poniéndose de pie.
- No, Giovanna, quédate necesito que hablemos – Dice Mercedes insistentemente.
- No hay nada que hablar entre las dos – Dice Giovanna poniéndose de pie – Si desea hable con mi padre sobre la expulsión, pero yo con usted no quiero hablar.
- Giovanna! – Gritó Mercedes al verla retirarse.
Giovanna iba pasando por donde Taylor y chocó con su hombro contra él.
- Giovanna – Le dice él.
- Aléjate de mí – Le grita Giovanna, con lágrimas en los ojos, se fue a su salón de clase y recogió sus cosas.
- Qué sucedió? – Consulta Silvia.
- Sucede que por culpa de la idiota me expulsaron – Responde Giovanna.
- Qué! Esto es inaudito! – Replica Zahori.
- No se preocupen, voy a estar bien – Responde Giovanna – Creo que eso no es lo peor, porque resulta que la nueva directora es mi mamá.
- Qué! – Exclama Zahori.
- Sí – Dijo Giovanna llorando desconsoladamente.
- Giovanna – Dice Taylor acercándose a ella.
- Qué diantres quieres? – Le dice Giovanna.
- Disculparme, Victoria no debe tratarte así – Le dice Taylor.
- Déjame en paz – Le dice Giovanna mirándole a los ojos.
- A dónde va señorita Jiménez? – Dice el profesor de educación musical.
- Me expulsaron y no voy a estar aquí dos minutos más – Responde la muchacha muy entristecida y enojada, ella caminaba afuera del colegio cuando se encontró con Fabio.
- Bebé, qué sucede? – Le dice su hermano mayor.
- Ay Fabi! Es esa mujer de nuevo, me instó, no pude contenerme y la golpee, me expulsaron – Dice Giovanna llorando – Adivina? Me expulsó Mercedes González.
- Mercedes! Tu madre? Aquí? Esto es imposible! Cuándo vino? – Dice Fabio alarmado.
- No lo sé, intentó hablar conmigo al darse cuenta quién soy, pero no le di tiempo y me fui, la verdad, no quiero hablar con ella ni con nadie – Responde Giovanna.
Giovanna se retiró al estacionamiento donde Mercedes estaba esperándola, la joven se sintió más exasperada y la ignora, pesar de que Fabio le pidió que conversaran, pero conocía bien a su hermana y le aconsejó que la dejara tranquila. De esa forma, Giovanna sale del recinto educativo, pero ella estaba tan enojada que lo que hizo fue irse a un bar al este de la capital, en donde comenzó a beber y a beber alcohol hasta ahogar su dolor y su soledad, cuando las manecillas del reloj marcaban las dos de la mañana, Giovanna decide volver a su casa, en donde al llegar Carmen la estaba esperando, al verla le ayudó con su mochila y luego le da un café bien cargado para disminuir el efecto del café, pero había más licor en su cuerpo que lo que hizo la empleada fue ayudarla a subir a la habitación. Al ser alrededor de las cinco de la mañana, Giovanna se despertó y al ver a su padre frente a ella se refugió entre sus sábanas.
- Qué sucedió ayer? – Le grita Fabricio.
- Veo que tu esposita amada te lo dijo... – Le respondió ella sarcásticamente.
- Sí, no solamente eso, también recibí la llamada de Rodolfo, y por tu culpa tengo que ir a una audiencia con tu directora para hoy en la tarde, por qué Giovanna? – Le consultó Fabricio muy enojado.
- Hazle las preguntas a Victoria, talvez ella si te de una buena versión – Dijo Giovanna.
- A ella no la pongas en esto, porque ella es la víctima – Le dijo Fabricio.
- Víctima? Víctima? Verdad que sí! Entonces, déjame sola, ya que soy yo la del problema, no quiero saber nada de su familia – Le grita Giovanna.
- Ah? Pues si usted no quiere formar parte de esta familia, no es mi culpa – Dijo Fabricio.
- Qué? Yo sé que me quieres echar de esta casa, como lo hizo con Fabio, por esa mujer... – Le reclamó Giovanna.
- Es bastante de su arrogancia! – Le gritó Fabricio mientras le dio una bofetada en la mejilla.
- Salta de mi cuarto! – Gritó ella muy sufrida por él.
- Esto no se ha acabado aún, porque si vuelve a llegar otra vez tarde como ayer, no se lo aceptaré – Le dijo él autoritariamente.
- Qué me va a hacer? – Le insita Giovanna al verlo retirarse – Porque con sólo el hecho de no significar nada para usted...ya estoy muerta.
El resentimiento de Giovanna contra su padre era evidentemente enorme, igual contra su esposa y su hermanastra, así que ella no salí de su habitación y lo que hizo fue dormir hasta el mediodía, cuando despertó volvió a ver a su violonchelo y se encontró con que había sido blanco de maldad, ya que tenía sus cuerdas rotas, Giovanna gritó con desesperación, y bajó a donde estaba Roxana para exigirle una explicación al respecto, pero ésta se negó a ser testigo del daño sucedido, Giovanna muy afligida salió de la casa con su violonchelo dirigiéndose a un luthier para repararlo, al llegar se encontró con Carmen, quien le explicó que había sido Victoria quien le había tomado una tijera y cortado las cuerdas, el enojó de Giovanna volvió de nuevo y se dirige a donde su padre y le cuenta lo sucedido, pero éste no le cree, así que ella se encierra en su habitación, pero la tristeza la condujo a llegar a la lacena, para robarse unas botellas de alcohol, al punto de dormirse.
A pesar de las amenazas y las advertencias de Arturo para con su hija, Zahori buscó la manera de estar al lado de Isaac, así que una hermosa tarde soleada, ellos se fueron a un restaurante a unas cuantas cuadras de la casa de la muchacha, Iveth los vio, mientras ellos gozaban de los alimentos deliciosos que ellos habían comprado, Isaac le da un beso suave, para luego obsequiarle una rosa y después le canta al oído una dulce melodía, para luego decirle:
- Mi amor, gracias por estar conmigo, y no puedo vivir un solo minuto sin ti, yo sé que esto es algo loco, pero quiero pedirte que te cases conmigo, te lo suplico – Dijo Isaac mientras él sacó una cajita de cristal conteniendo un anillo.
- Usted conoce bien a mi padre, conoces bien lo que me ha dicho – Dijo ella con el rostro afligido con enormes ganas de amarlo.
- No quiero perderte, lo que quiero es estar con usted – Insiste Isaac – Aunque sea secretamente, quiero ser capaz de demostrarte mi amor, soy diferente, y quiero compartir mi vida contigo.
- Amor... – Dijo Zahori con lágrimas en los ojos – Aunque mi padre no lo acepte yo te amo, y yo tampoco quiero perderte...sí acepto.
Isaac introdujo el anillo en el dedo de la joven, cuando escucharon que alguien la llamó, la muchacha se dio vuelta para ver quién era, Arturo, se notaba encolerizado con ellos, se acercó y jaló del brazo a Zahori para llevársela.
- No le dije que no se acercara a ese músico? Olvídate de él.
- Padre, pero yo lo amo – Repuso Zahori - Por favor, déjame estar con él.
- Nunca! – Gritó Arturo.
- Caballero – Interrumpe Isaac – Amor a su hija y la respeto...considero que usted no me ha dado la oportunidad de demostrarle mis buenas intenciones para con ella.
- Váyase! – Le gritó Arturo dándole un puñetazo a Isaac, mismo que Isaac le respondió con otro.
- Viste? Ni respeta a tu padre – Gritó Arturo.
- Pero usted empezó – Dijo Zahori.
La joven se suelta de su padre para levantar a Isaac, pero Arturo la toma de nuevo del brazo y la empuja para llevársela con él, ella se afloja de nuevo y corre por la calle, para cruzarla, pero en ese instante un vehículo se vino a gran velocidad contra ella, causando el accidente, el dolor en el cuerpo fue tan intenso que se desmayo, Arturo gritó muy impactado al ver lo sucedido, acudiendo a su hija, pero la mujer no despierta, mientras otro hombre trató de darle primeros auxilios, pero todo era inútil, y minutos después, la ambulancia llegó por ella, Arturo estaba preocupa y no en menor número, Isaac; los paramédicos la levantaron y la subieron al vehículo.
- Quiero ir con usted – Dijo Isaac.
- Ni se le ocurra...esto es su culpa – Dijo Arturo.
Zahori pierde el conocimiento totalmente y no experimenta dos paros cardiorrespiratorios en su transferencia al hospital. En la entrada el hospital, Zahori tenía un estado crítico, pero aunque después del monitoreo y de la atención la hicieron recuperarse de su inconciencia, Elizabeth llegó al hospital muy preocupada por su hija, y el doctor la dejó entrar para verla, aún estaba sedada, así que la madre de la joven acarició su mano mientras la veía dormir.
- Mi amor, lo siento, no sabes, me siento muy culpable de no defenderte ante tu padre – Dicho esto, Zahori dejó fluir un par de lágrimas ante las palabras de aliento de su madre – Amor, recupérate pronto...
Durante el lapso de tiempo que Elizabeth estaba con ella en su recuperación mientras que su marido estaba en el trabajo, por tarde, escucha la voz dulce de su Isaac, ella intentó despertar, pero no podía.
- Zahori, no te voy a dejar sola, te acompañaré donde vayas, perdóname por haberte hecho esto...porque de saber que te iba a suceder esto, no te hubiera llamado para evitarte esto...te amo...
La joven comenzó a llorar incontrolablemente al escucharle decir esas palabras, lo que hicieron que Isaac se acercara a ella para abrazarla mientras le acariciaba el cabello y la besaba suavemente agradecido al verla despertar, en ese momento Arturo ingresó al cuarto, y reaccionó de manera violenta contra Isaac al verlo allí, Zahori escuchaba los gritos y las palabras de desprecio de parte de su padre contra el hombre que ella amaba, la joven se sentía muy mal, tanto que la máquina de monitoreo de su presión arterial comenzó a sonar aceleradamente, el doctor tuvo que hacer unas observaciones para darse cuenta que la joven necesitaba una transfusión de sangre, ya que con el accidente había perdido una cantidad considerable, pero desde incidente no había sufrido algún síntoma adverso hasta esa ocasión, luego de hacer unos diagnósticos se determinó que Arturo por su padecimiento de diabetes no podía donar su sangre a Zahori, mientras que Elizabeth por su padecimiento de presión arterial alta tampoco podía hacerlo, así que Isaac conversó con el doctor para decirle que él tenía sangre de tipo universal, Arturo muy enojado le gritó a Isaac:
- Prefiero a mi hija muerta antes que en sus venas esté su sangre…váyase no lo quiero ver aquí!
- Pues yo sí! – Interrumpió Elizabeth.
- Qué quieres decir? – Dijo su esposo muy enojado.
- Que no me importa quién es él o qué ha hecho…no ves que se ha ofrecido para salvarle la vida a nuestra hija – Le dijo ella un tanto incómoda.
- Gracias señora por su apoyo – Dijo Isaac.
- Señor, considero que debería dejar su orgullo de lado y permitir que este joven sirva de donador para su hija – Aconsejó el médico.
El doctor le hizo a Isaac los exámenes pertinentes para poder realizar la transfusión de sangre, saliera bien o no el joven estaba muy entusiasmado de que dio parte de sí para contribuir en la mejoría de salud de su amada, después de todo quería demostrar que él era lo contrario de que Arturo decía, después de aquella transfusión Isaac se retiró tranquilamente, para evitarle más disgustos a Zahori, durante la estadía de ésta en el hospital, las visitas de Giovanna eran constantes y su recuperación era paulatinamente, y su amiga cuando no estaba con ella se refugiaba en alguno de los centros nocturnos con tal de no llegar a verle el rostro a Fabricio, mientras que su amor por Taylor se lo iba consumiendo el tiempo, aunado a ello, la aparición de su madre la tenían muy afectada, tanto que su consumo de alcohol no era menor que antes, mientras Zahori comenzaba a tenerle afecto a Randall Ortega, su doctor de cabecera, quien era un hombre joven y soltero, a quien le había tomado mucho afecto, tanto que ella logró sentirse seducida por él, después de una semana de internamiento, Zahori se había recuperado totalmente y era momento de volver a casa, antes de hacerlo ella se encuentra con él dándole un abrazo muy afectivo seguido de un beso en la mejilla, pero él se devolvió besándole suavemente los labios, ella muy sorprendida se aparta de él, pero él la jala suavemente hacia su cuerpo para besarla de nuevo, mientras ella lo mira a los ojos, y se retira sin decir algo. Luego se reincorpora a la escuela, una mañana de domingo, Zahori estaba en su casa, cuando escucha una fuerte discusión entre sus padres, y alguien más, ella baja y logra observar a Isaac, siente que su corazón se acelera rápidamente al verlo allí, pero toma una posición muy autoritaria y dice:
- Qué sucede aquí?
- Nada, es mejor que me retire - Responde Isaac.
- No! Usted de aquí no sale! – Dice Zahori autoritariamente.
- No te permitiré que sobrepases mi autoridad – Intervino Arturo muy enojado.
- Papá, amo a Isaac, y tienes que aceptar que lo amo – Dijo Zahori.
- Váyase! – Le grito Arturo a Isaac.
- No! – Gritó Zahori, con lágrimas en los ojos – Con todo el respecto que te mereces como mi padre, por favor, te suplicó conócelo bien, Isaac es un buen hombre.
- Estás loca? Ni llores, esto no es para tanto – Indicó su padre.
- No, padre, entérate que no quiero sacrificar mi felicidad por un capricho tuyo – Dijo Zahori.
Que la manera, Zahori toma del brazo de Isaac y lo lleva el cuarto, momentos largos de la charla allí, Isaac posterior se retira de la casa conmovido por lo que había causado lo que Zahori había hecho hizo frente a su padre. En la noche siguiente recibió de nuevo la visita de Isaac, quien estaba dispuesto a salir con ella, de ese modo, la pareja se fue para la zona sureña de la capital, llevándola a un salón de boliche, donde jugaron y compartieron sus desventuras durante las horas en que estuvieron juntos, y era evidente que ellos no iban a dar tregua a la voluntad de Arturo, menos, contra las falsedades que Iveth generaba para hacer que el padre de Zahori se levantara en contra de su propia hija.